Abraham alcanzó un nivel de intimidad
tan grande con Dios que pudo dialogar con Él
e interceder por toda la ciudad. Ahora bien,
¿qué hizo que Abraham tenga semejante favor de Dios para interceder al punto que Dios
mismo se pregunte:
“¿encubriré Yo a Abraham lo que voy a hacer?” (Génesis 18:17).
¿Qué ves en Abraham que lo hizo tan especial? ¿Qué podemos nosotros aprender de
él para ser especiales ante los ojos de Dios?
Veamos:
1. Abraham fue un hombre con propósito, por eso Dios dice: “¿Encubriré Yo a Abraham lo que voy a hacer, habiendo de ser Abraham una nación grande y fuerte, y habiendo
de ser benditas en él todas las naciones de la
tierra?”. Así como Abraham, tú y yo también
fuimos creados con propósito.
2. Abraham tenía carácter para pastorear su familia: “Porque yo sé que mandará a
sus hijos y a su casa después de sí, que guarden el camino de Jehová” (Génesis 18:19).
3. Abraham tenía integridad y pureza,
dos características que activan la bendición
de Dios: “…haciendo justicia y juicio, para que
haga venir Jehová sobre Abraham lo que ha
hablado acerca de él”.
Lo que Dios habló sobre Abraham va a
venir sobre nosotros por justicia, porque tenemos propósito, carácter y nos vamos a mover con criterio, integridad y pureza.