Pr. José Contreras
El pastor José M. Contreras nació en la ciudad de Talca, Chile; el 4 de Abril de 1963. Junto a su familia asistían a la Iglesia Presbiteriana Nacional de Talca hasta el año 1976 que se mudaron a Argentina, primero a la ciudad de Balcarce y luego a Mar del Plata.
A pesar de su resistencia al llamado de Dios y luego de una linda experiencia con el Señor, asumió el pastorado en una pequeña congregación en el mes de Febrero de 1994, donde junto a su amada esposa y sus tres hijos, Kevin, Julieta y Andrés, han desarrollado una gran tarea en beneficio del Reino de Dios.
Su vida y su ministerio ha sido probado por agua y fuego, sufriendo la pérdida de su primogénito y una enfermedad que lo llevó a estar postrado durante casi un año y comenzando de allí siete años de diálisis que concluyó en un trasplante renal (aún habiendo sido él instrumento de Dios por haber orado por personas con el mismo problema que recibieron sanidad divina).
Durante 10 años junto a su esposa fueron los coordinadores del P.M.S. (Programa Ministerial Supervisado) llevando capacitación a miles de personas que deseaban instruirse.
Fundaron el Ministerio “Río de Bendición” en el año 2003 respondiendo a la palabra profética recibida, que llevarían bendición a otras ciudades y países.
Dios le ha dado al pastor José un intenso amor paternal lo que lo lleva a desarrollar una tarea apostólica apoyando y ministrando a varios pastores.
Su mayor anhelo es ver a cada hijo de Dios ejercer el ministerio a través de su don, en beneficio, crecimiento y expansión del Reino de Dios.
Pra. Susana Manzo
Desde muy niña fue guiada a seguir los pasos del Señor. Sus padres conocieron al Señor cuando ella tenía tan sólo 2 años de edad y a partir de allí fue creciendo bajo la enseñanza de la Palabra de Dios; cuando por fin a los 12 años en una Escuela Bíblica de Vacaciones aceptó al Señor Jesús haciéndolo Rey de su vida por completo.
Desde ese momento su intensa búsqueda en conocer los misterios de Dios no ha cesado.
El sueño de tener una familia la llevó a trabajar sobre ese propósito y hoy es ejemplo para muchas mujeres a las que pastorea, a quienes enseña las claves para tener un mejor hogar.
A los 21 años contrajo matrimonio con el pastor José, a quien acompaña en el ministerio con su apoyo y dedicación, y con quien ha pasado muchas pruebas que afianzaron su confianza en Dios y un continuo crecimiento; una de las cuales fue la muerte de su primer hijo de tan sólo cuatro meses y medio de edad, causada por una muerte súbita.
A los dos años y medio de inicio de ministerio su esposo cae bajo una fuerte enfermedad a la que ha tenido que enfrentar junto a sus tres pequeños niños.
Su mayor anhelo es cada día buscar una mayor revelación y unción para continuar la tarea que el Señor le encomendó; lo cual hace con pasión.
La forma en que disfruta de la Presencia de Dios es algo que inspira a quienes están a su lado. ¡Una adoradora de verdad!